La ONU aprobó una resolución que urge a los Estados Unidos a levantar el embargo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba desde 1959.
La resolución, aprobada por mayoría aplastante con 187 votos a favor, 2 en contra (EE. UU. e Israel) y 1 abstención (Moldavia), busca promover la igualdad soberana de los Estados y la no injerencia en asuntos internos.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, calificó las sanciones como «medidas inhumanas» y «propias de una guerra económica extrema» que buscan disuadir a cualquier nación que defienda su soberanía, enfatizó de este modo: «dejad a Cuba vivir en paz».
La resolución cuenta con el apoyo de más de 180 países y 35 instituciones internacionales, incluyendo Unicef, el Programa Mundial de Alimentos y la Organización Mundial de la Salud.
El informe anual de Cuba estima que el costo de las sanciones entre marzo de 2023 y febrero de 2024 ascendió a 5.056,8 millones de dólares.
Las muestras de apoyo más contundentes a la causa cubana llegaron por parte de Rusia, de miembros del Movimiento de Países No Alineados o de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
Irán se pronunció enérgicamente contra EEEUU en la Asamblea General de la ONU, calificando el bloqueo a Cuba como «una amenaza para el multilateralismo» y afirmó que las sanciones son un método para lograr objetivos nacionales que ponen en peligro la paz y seguridad internacional.
Resolución clave:
- Necesidad de poner fin al embargo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba
- Aprobada por mayoría aplastante con 187 votos a favor, 2 en contra y 1 abstención
Contexto histórico:
- Primeras sanciones impuestas en 1959
- Primer gran bloque de medidas en 1962 bajo el presidente John F. Kennedy
- Ampliaciones y intensificaciones en 1996 (Ley Helms-Burton) y 2017-2021 (Administración Trump)